Como sucede con las religiones, la construcción de calendarios tiene su origen en la aguda observación de la naturaleza: los movimientos del sol y de la luna, pero también en la llegada de las lluvias, la transformación de las plantas o la aparición de ciertas especies animales.
El aceite de Pitaya, por su alto contenido de grasas Omega 3,6 y 9 y por su alto contenido de esteroles y polifenoles, podría presentar propiedades en beneficio del cuidado de la piel. Por su composición y propiedades físico químicas, tiene potencial para ser utilizado en la industria cosmética, al igual como se viene utilizando el aceite de Tuna o Argán.